A la fecha, el 95 por ciento de los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) cuentan con sus exámenes de confiabilidad vigentes, requisito indispensable para ingresar o continuar en funciones dentro de la corporación.
Estos exámenes deben renovarse cada dos años, ya que así lo estipula la normatividad, explicó Jorge Armendáriz, vocero de la SSPE, quien señaló que se trata de un proceso permanente y obligatorio para todos los agentes.
“El 5 por ciento o menos, pero son alrededor de 80 elementos que no tienen vigente el examen, están en la lista”, detalló el funcionario, al precisar que dichas personas no están en la operatividad directa de seguridad.
De acuerdo con Armendáriz, a los policías que se encuentran en esta condición se les retira el arma de cargo y son reasignados a actividades administrativas o puntos fijos de revisión, como casetas u oficinas, en lo que reciben cita por parte de la Fiscalía para someterse nuevamente a la evaluación.
En relación con los resultados de las pruebas de confiabilidad, el vocero aseguró que no existe ninguna alerta que vincule a los agentes con actividades ilícitas ni con grupos criminales, lo que fortalece la operatividad y la confianza en la corporación estatal.
“Nosotros no traemos ahorita ningún dato alarmante, realmente están los elementos actuando bien y aunque están en permanente revisión, por así llamarlo, realmente no hemos tenido nosotros que algún elemento esté vinculado a algo así”, puntualizó Armendáriz.
El vocero subrayó que la evaluación constante es un mecanismo de control que permite a la SSPE mantener una plantilla confiable, reduciendo riesgos y fortaleciendo la disciplina al interior de la corporación.
Con ello, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado refuerza su compromiso de garantizar que sus elementos estén certificados y evaluados, en apego a las normas de seguridad y transparencia que demandan las instituciones en el país.

